Ejemplares de Campo Bravo lucieron poca raza y tras
varas buscaron las tablas. Emilio Serna dio una vuelta al ruedo y Alejandro
Morillas se llevó el trofeo del Alferado.
(Desde Lampa,
Puno, textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros y revista
Fiesta Brava)
El último festejo de la feria en honor al
Apóstol Santiago, patrón de Lampa, no alcanzó el éxito esperado y los coletas
se fueron de vacío tras pechar con un encierro sin atributos y muchas carencias,
a más de estar poco finos con la espada.
Los bichos estuvieron fuera de tipo y tras
la puya se orientaron a tablas y algunos, como el 3°, desarrollaron peligro
sordo. Emilio Serna fue volteado tras doblarse con el morito, que hizo por el
bulto y lo prendió con la pala del pitón izquierdo. El lote del murciano anduvo
por los extremos; el 1° soso, tontón y parado; el 3°, rajado, defendiéndose y
arreando para coger.
El lote de Morillas, también rajadito
excepto el 4°, fue más propicio para el toreo bueno. El 2° se movió con picante
pero el torero se decantó por el toreo de platea, sin ese cimiento de arte muy
propio del sevillano. Con el que cerró plaza se empleó e intentó el toreo de
sentimiento y profundidad, lográndolo a momentos por el pitón izquierdo del
morlaco.
Ficha. Miércoles día 31 de julio de 2013.
Último festejo en honor al patrón Apóstol Santiago. Tarde soleada, plaza llena.
Emilio
Serna (Azul marino y oro) Dos pinchazos y estocada
delantera, saludos. Dos pinchazos, estocada delantera y caída, vuelta al ruedo.
Alejandro
Morillas (Marfil en plata) Estocada delantera y
caída, palmas. Dos pinchazos, estocada entera, palmas.
Emilio Serna. |
Añadir leyenda |
Alejandro Morillas. |
El maestro César Caro agarrándose en un puyazo. |
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