La pájara apenas se movió.

Una impresionante corrida de toros de San Simón saltó esta tarde a la arena de Cajabamba. Mucha edad y volumen pero escasísimo juego dieron los astados haciendo zozobrar las ilusiones de los toreros. Espléndido día y hermosa plaza para tamaño revés artístico. Mañana saltan los de El Olivar con Alfonso de Lima y Torres Jerez en el cartel… 

(Desde Cajabamba, Cajamarca, textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros y revista Fiesta Brava).

Atractiva y pintoresca ciudad es Cajabamba, donde destacan el buen trazo y la limpieza de sus calles, con su hermosa y moderna plaza de toros en el añejo barrio de Gloriabamba. Volvimos después de algunas temporadas y la encontramos fresca y radiante en el regazo de aquellos enormes apus moteados de alisos y eucaliptos.

Su gran plaza de toros luce bien cuidada y mejor aperada. Hay detalles taurinísimos como la piedra que enluce la barrera, los tonos de la valla y el reloj que marca la hora para los tiempos del espectáculo. El orden y la organización es otro cuento que ya quisieran ostentar plazas con mayor aforo. En ello Cajabamba es muy especial.

Lástima que esta vez su majestad el toro descompuso el armatoste. Magníficamente presentados, los cuatro toros de San Simón fueron un amasijo de carne semoviente que no sirvió a los propósitos de los coletas. Solo el 3° se movió en el capote y medio ilusionó a la gente. El 2° se echó en los medios y apuntillado tras hacerle hilo a Yovera. El 4° se movía para arrollar y llevarse por delante al torero y el 1° simplemente se paró sin encelarse siquiera con la franela en el hocico. La gente abandonó el coso en desazón y rabiando su suerte. Mañana saltan cinco ejemplares de El Olivar. Que Dios reparta suerte.

Ficha. Jueves día 16 de octubre 2014. Primera corrida de la feria en honor a la Santísima Virgen del Rosario. Cuatro ejemplares de San Simón, divisa verde y amarilla. Cristóbal Pardo (Azul en azabache) Dos pinchazos, estocada caída, silencio. Estocada entera desprendida, tres pinchazos, descabellos, silencio tras dos avisos. Alejandro Parraro (Grana en azabache con detalles en verde) Pitos en su 1°, que fue apuntillado. Dos pinchazos, estocada contraria, estocada delantera y caída, silencio.   

Así saltaron los toros de San Simón a la arena de Cajabamba.

De allí para adelante acusó falta de claridad y arreaba defendiéndose. El diestro colombiano tampoco lo vio claro.

El corrido 3°, segundo del lote de Cristóbal Pardo, medio se dejó en el capote..

Los toros de Alejandro Parraro sirvieron mucho menos.